XI

¿ Si te planto un beso
brotará el amor?

SOL-EDADES

El mar está limpio y el vaso brilla, sus labios permanecen cerrados y sus cuarenta se celebran para ella misma, no hay velas, ni tarta, ni compañía, solo le sopla el viento para relucir su dicha. Las aristas del sol alcanzan su boca, y le riegan las pecas como si fueran semillas a la espera de más meses, más días, y más edades. Carmela

DE DONDE SALES.

                       Cuando tú te descubres, yo  puedo  conquistar la luna con los labios.

De las cosquillas del mundo
sales tú,
FOTOGRAFÍA DE ANA MURILLO
como una carcajada que dobla
sus muros
y provoca bocanadas
de deseos.

De la sensualidad del océano emerges,
donde nada que se desvanezca
 teme irse al fondo.
Tú flotas,
como la superficie
que se acaricia blanda,
hecha a medida.

De un libro de poesía
sales,
de los textos de Bécquer,
Salinas y Lorca,
que ya auguraban
que existirías.

De todo lo inmenso,
de allí vienes,
y te levantas como un rascacielos
al otro lado de la cama,
o como un faro
que alumbra y cuida
todos mis litorales.

Las letras de tu nombre
forman constelaciones,
cúmulos de nebulosas
que sobrevivirán al tiempo,
para no perdernos
nunca, 
el beso que nos pertenece





A VENTANA CERRADA, POEMA QUE FLUYE
FOTOGRAFÍA DE ANA MURILLO
Las cosas que te decía,
no eran mentira
eran secreto,
y lo que mi hombro derecho
lloró en el tuyo,
nunca lo supo mi izquierdo.

Si te parecí un espejismo de pez
entre las olas de tu apetito,
recuerda las flores de azúcar
tras  la escarcha,
y mis besos asados
bajo el mes de agosto.

Las cosas que te decía
eran verdad
aunque secreto,
por eso,
nunca levanté la voz
de tu pecho,
y así,
 los susurros cavernarios
inventaron el fuego
y el eco.

¿Y qué si nadie pudo verlo?
Vivimos de las rendijas,
del invento,
de la parte de atrás de los muros,
del otro lado de la puerta,
y del secuestro
más libre del mundo.